no puedo evitar pensar en ti insistentemente,
observar tu retrato en la pared y al cerrar los ojos,
encontrar tu aroma en cada pared y en ellas tu nombre.
Me entristece cada fecha que ya no es importante,
la veo venir desde las frías lejanías donde me encuentro,
la veo golpearme en la cara y envolverme enteramente,
se aleja lentamente sin querer soltarme la cara.
Perdóname por no poder olvidarte todo el tiempo,
lo intento cada vez que evito caminar por esa avenida,
cada que apresuro mi trabajo para evitar verte,
o cuando prefiero no abrir el cajón donde te guardo.
Perdóname por que no quiero seguir intentándolo.